Nadie sabe cuando el misterio puede asomarse a nuestras mentes: puede ser en el momento más inesperado, en el lugar más inhóspito, a la vuelta de la esquina, u oculto bajo cualquier forma... Lo cierto es que el misterio, queramos o no, forma parte de nuestras vidas. Y hace poco descubrí un pedacito de ese mundo misterioso con el que convivimos gracias a un relato.
Semanas atrás tuve la oportunidad de leer Zombies, la antología de relatos de John Joseph Adams, un compendio de historias relacionadas con los muertos vivientes, donde una de las mejores historias del libro estaba basada ligeramente en un hecho real. Me refiero a El Niño Muerto, de Darrel Schweitzer (The Dead Kid, 2002). Esta que os traigo a continuación es la verdadera historia del misterioso crimen que, cincuenta años después, sigue sin resolverse...
El 25 de febrero de 1957 se produciría un hecho que trastocaría la calma y la tranquilidad de la ciudad de Philadelphia, en el estado de Pennsylvania. Un vecino de la zona, aficionado a la caza durante sus ratos libres, se acercó a la angosta carretera de Susquehanna para echar un vistazo a las trampas para animales que había dejado preparadas en los dias anteriores, y lo que encontró fué un bizarro y macabro descubrimiento. En una zona arbolada y oculta entre una gran cantidad de arbustos encontró una caja de cartón perteneciente a una cuna de bebé, y en su interior, el cadáver de un niño de entre cuatro y seis años de edad, desnudo y envuelto en una manta.
Lugar donde fue encontrada la caja de cartón
Bastante pálido y de ojos azules, el niño presentaba síntomas de desnutrición, además de numerosas contusiones por todo su cuerpo, especialmente en la cabeza y en la cara. También presentaba cicatrices, y al menos tres de ellas parecían ser fruto de algún tipo de operación quirúrgica. Las palmas de las manos y los pies estaban arrugadas y ásperas, hecho que la policía atribuyó al haber estado durante cierto tiempo en contacto con el agua. Los especialistas situaron la muerte del chaval en un intervalo de tiempo entre quince y dos días antes del hallazgo del cadáver.
Retrato-robot realizado por la policía
La caja en la cual se encontró el cuerpo estaba en buen estado y no presentaba ningún tipo de huella dactilar, al igual que la manta que servía de mortaja al niño. Cerca de la caja se encontró una gorra azul de pana, pista que sirvió a la policía para averiguar (gracias a la tienda donde fué adquirida) que pertenecía a un varón de unos treinta años de edad que acudió al establecimiento vestido con ropa de trabajo. Además, también se encontaron con un jersey de adulto, en cuyo interior había un gato muerto, lo cual no hizo sino añadir aún más misterio al ya de por sí extraño caso.
Imagen del niño dentro de la caja donde fue hallado.
Ante la ausencia de indicios, pruebas sólidas o pistas que seguir para esclarecer el caso, han sido innumerables las teorías que han surgido a lo largo de los años, la mayoría desechadas por la policía ante la falta de consistencia de sus argumentos y la inexistencia de una línea de investigación fiable que seguir para resolver el misterio. A punto de cumplirse cincuenta y tres años del macabro hallazgo, todavía sabemos sin conocer quién era el niño que apareció aquel dia en aquellña caja de cartón, y desconocemos el motivo de su muerte y quién le dió sepultura de aquella forma tan inhumana y grotesca.
Os facilito un enlace a una página web norteamericana que ofrece numerosos datos e imágenes del misterioso caso sin resolver, America´s Unknown Child, y un video que resume en poco más de seis minutos todo lo relevante en cuanto a este crimen sin resolver.
6 comentarios:
No Manches!!! (sorry por la expresion mexicana de sorpresa, pero es lo primero que pensé).
Que curiosos y morbosos somos. Me ha encantado conocer esta historia sorprendente, intrigante y que huele a un caso digno de Sherlock Holmes... sí, el del siglo XXI
Muaaack misterioso
me ha dejado los pelos de punta :O que historia mas tétrica
La verdad es que es una historia de lo más siniestra y el relato del libro de Zombies, como bien dices, es de lo mejorcito del libro.
Un saludo!!!
Escalofriante, y además da mucha penica el pobre niño. :(
Joer, Mike, no podré dormir esta noche. Si me vieras la cara ahora mismo...
Esto me ha hecho pensar en algo: ¿podremos vivir algún día sin esa preocupación que se nos queda en el cuerpo después de leer una cosa como la de arriba, simplemente porque tú no la has escritor porque no hay? O sea, ¿viviremos algun día sin estas cosas, estas muertes, estos misterios?
El relato me pareció de lo mejor, pero la verdad sieeeempre es mejor un relato que una historia real. La historia real te hace decirte: mañana podrías encontrar uno de estos en la esquina. Mañana tu hermanito podría aparecer en una caja, y está lejos de tí, y no te enterarás y...podrías haber sido tú ese de ahí.
Todo eso aparece en tu mente a la hora de leer algo como eso. Y, mientras tanto, te duele la barriga. Estas preocupado, jodidamente preocupado y no lo soportas.
Es una sensación horrible. Pobre niño. Yo le rezo una oración para que todo le vaya bién donde quiera que esté.
Wilson (Scott_Landon)
:O imaginar que hay cosas así o peores rondando ahí por el mundo, como alguien puede hacer algo tan macabro? cuales fueron sus motivos? lamentablemente nunca lo sabremos.
Lo que más me llama la atención son las heridas que indican una operación. :S
Saludos.
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