El bosque es un lugar demasiado oscuro y profundo, tengo promesas que cumplir y mucho que viajar antes de poder dormir...

Encuentra lo que buscas...

Mostrando entradas con la etiqueta Nicolas Cage. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Nicolas Cage. Mostrar todas las entradas

Ghost Rider: Espíritu de Venganza (Mark Neveldine-Brian Taylor, 2011)

Título original: Ghost Rider: Spirit of Vengeance   Género: Acción, Cómic
Duración: 95 minutos   País: EE.UU.

Con el fin de controlar sus deseos de venganza, Johnny Blaze, El Motorista Fantasma, que ve sus poderes como una maldición, vive apartado del mundo y sin relacionarse con nadie, pero acaba siendo localizado por el monje Moreau, que necesita su ayuda para buscar a Nadya y a su hijo Danny antes de que los encuentre Roarke, un viejo conocido de Blaze.

Bien, vamos allá, sin rodeos, sin concesiones y sin paños calientes: Ghost Rider: Espíritu de Venganza, la última película estrenada hasta la fecha protagonizada por Nicolas Cage, es un fiasco en toda regla, un completo despropósito, un truño de proporciones mastodónticas... En definitiva, UNA MIERDA COMO UNA CATEDRAL.


Para empezar, estamos ante una secuela totalmente innecesaria, al menos planteada tal y como se ha planteado. Ya la primera entrega, titulada Ghost Rider (2007) y dirigida por Mark Steven Johnson -responsable de Daredevil (2003)-, resultó ser una discretísima cinta de acción protagonizada por un personaje de cómic de dilatada trayectoria que merecía, sin duda alguna, una adaptación con mucho más empaque que la que se llevó a cabo en el 2007, que a pesar de todo produjo pingües beneficios. Lejos de enmendar dicho error y animados por la recaudación mundial de dicho film, ciertas mentes privilegiadas de la industria hollywoodiense deciden cuatro años después que es necesaria una secuela y depositan el proyecto en manos de Mark Neveldine y Brian Taylor, el dúo dinámico -o más bien frenético, podríamos decir- responsable de films como Crank (2006) y Crank: Alto Voltaje (2009).


Este binomio de directores opta por pasar olímpicamente de la trayectoria en papel de Ghost Rider y su mitología y deciden que lo mejor es poner en marcha prácticamente un reboot total del personaje pero, eso sí, echando mano del mismo actor que encarnó a El Motorista Fantasma en el film de 2007: nuestro necesitado amigo Nicolas Cage. Además, llama poderosamente la atención que el pésimo guión se articule en torno a una historia de David S.Goyer, quien escribiera en su día las lineas argumentales de Dark City (1998), Batman Begins (2005) o El Caballero Oscuro (2009). Se suele decir que todo el mundo tiene un mal día... Está claro: los días malos de David S.Goyer se sucedieron uno tras otro mientras redactaba esta historia simple, ramplona y rebosante de tópicos digna de cualquier telefilme cutre de sobremesa. Quizás es porque estaba volcado por completo en el guión de The Dark Knight Rises, que se estrena dentro de unos meses.


Todos sabeís que le tengo un cariño especial a Nicolas Cage, pero con esta película ha tocado fondo y no me cabe la menor duda de que en esta ocasión nos ha brindado la peor interpretación de su carrera. Sin duda acuciado por una delicada situación económica personal, el bueno de Cage se ha visto obligado en los últimos años ha aceptar prácticamente cualquier papel que ha pasado por sus manos sin reparar en el daño que dichas participaciones en films de dudosa calidad le inflingen a su reputación. En esta ocasión  vuelve a ser manifiesto el tremendo pasotismo del sobrino de Coppola y la desgana con la que aparece en pantalla, mostrándose visiblemente irritado, incómodo y en ocasiones totalmente forzado y ridículo, como el tono general del film. Está claro que los números rojos de su cuenta bancaria llevan las riendas de su carrera desde hace unos años. Una auténtica pena...


Pero no solamente Nicolas Cage está nefasto, sino que prácticamente todo el reparto en general da vergüenza ajena. Bochornosa es la presencia casi testimonial y anecdótica de Christopher Lambert, quien fuera antaño el inmortal Connor MacLeod y relegado en esta ocasión a un papel absurdo y esperpéntico: Methodius, un estrafalario monje caracterizado de la manera más cutre que recordeís y con apenas dos líneas de diálogo. En la misma línea sonrojante tenemos al veterano actor irlandés Ciarán Hinds dando vida a uno de los villanos más ridículos de los últimos tiempos -ojo a la ceremonia del final, con qué salero se contonea- y también a su patético esbirro Ray Carrigan, tristemente interpretado por Johnny Whitworth. De la heroína de la historia, interpretada por Violante Placido -la Neus Asensi italiana- mejor ni hablamos. El único que aporta algo de dignidad al conjunto es Idris Elba, quién ha llegado a reconocer que estuvo dos días pensándose si aparecer en el film o no. Está claro que no lo meditó el tiempo suficiente.


Por lo demás, tenemos unas localizaciones de baratillo -el este de Europa, donde es evidente que resulta mucho más barato filmar-, unos efectos especiales que dejan mucho que desear y un montaje atropellado que más que entretener, confunde y aturde al espectador. La ausencia de coherencia en el lamentable guión lastra la película desde los primeros minutos de metraje, donde sólo la secuencia inicial se libra del desastre, y teniendo que recurrir a una misma escena dos veces -el Motorista Fantasmas meando cual lanzallamas- para evitar que el espectador quede sumido en un coma irreversible debido al tedio y la vergüenza ajena  que impera en la historia. Decir que es una mala película es quedarse corto...



Nuevo trailer y poster para Ghost Rider: Spirit of Vengeance (¡grande Nicolas Cage!)

Ya pudimos ver hace unos meses, en pleno verano, el primer póster y trailer de Ghost Rider: Spirit of Vengeance, secuela que se estrenará en febrero del próximo año 2012 con  Mark Neveldine y Brian Taylor como directores y con el gran Nicolas Cage repitiendo como Johnny Blaze, el Motorista Fantasma. Ahora, cuatro meses después, tenemos nuevo cartel y otro trailer para comprobar que la cosa promete: gasolina, cadenas, cuero, fuego y Nicolas Cage con nuevo peluquín dispuesto a darlo todo sobre su humeante montura una vez más. Sí, ya sé que a muchos os echará para atrás la simple presencia del señor Cage, pero a mí no: reconozco que le tengo cierto cariño y que muchas de sus películas, aunque malas, son capaces de arrancarme una sonrisa sea cual sea su género. Dicho queda: yo esta no me la pierdo por nada del mundo...


Furia Ciega (Patrick Lussier, 2011)

Título original: Drive Angry   Género: Acción, Road Movie
Duración: 104 minutos   País: EE.UU.
Música: Michael Wandmacher   Web: warnerbros.es/driveangry/index.html

Después del asesinato de su hija y del secuestro de su nieta, Milton (Nicolas Cage) emprende su particular e implacable venganza contra los culpables. Junto a él viajará una camarera que desconoce el oscuro pasado de Milton, y ambos serán perseguidos por la mano derecha del mismísimo diablo.


Hoy toca avisar de nuevo y advertiros que esta reseña/crítica carece totalmente de objetividad debido a mi particular fanatismo por Nicolas Cage y mis gustos excesivos. Furia Ciega (Drive Angry) es una película llena de excesos y repleta de violencia, acción, velocidad, sexo, pólvora, sangre, estridente música rock, caminos polvorientos y polvos por el camino, además de meter por medio a una secta de pirados y a un ayudante del Diablo muy especial. Con semejantes ingredientes, servidor se lo pasó muy bien en el cine disfrutando de un Nicolas Cage más vengativo que nunca y con nuevo look capilar.


El elegido para combinar todos esos ingredientes fue Patrick Lussier, director de la reciente San Valentín Sangriento (2009) y del futuro remake o reboot de Hellraiser, consiguiendo un resultado, digámoslo así, "peculiar". Cualquier atisbo de lógica en el guión es pura coincidencia, y he de reconocer que el argumento consiste en un refrito muy especiado que nos recordará a películas como Terminator, Death Proof, Machete y muchos títulos más, especialmente si están protagonizados por el vengativo antihéroe de turno.


Entiendo perfectamente que será un truño para gran parte del respetable, pero yo me he divertido, me he reido por momentos y no he tenido en ningún momento la sensación de haber tirado la entrada o de haber sido engañado, cosa que me ocurrió recientemente con Invasión a la Tierra, en la que a duras penas pude aguantar despierto. Con Furia Ciega es difícil caer en el sopor porque cuando no te mantienen despierto los tiroteos lo hace el peluquín de Nicolas Cage, que invade la pantalla moviéndose con estilo al ritmo que marcan las balas.

Está claro que Nicolas Cage no está hecho para ser un héroe de acción, al menos no como los que estamos acostumbrados a ver en la gran pantalla. Aún así, en esta ocasión se asemeja más a Charles Bronson cuando éste interpretaba a vengadores obcecados de oscuro pasado y futuro incierto, y la verdad es que en los últimos tiempos he visto al bueno de Cage en roles mucho peores debido a su imperiosa necesidad de ingresar dinerito en su cuenta. Su compañera en pantalla, Amber Heard, se limita a ejercer de partenaire sexy  pero de armas tomar, con escuetos diálogos y una personalidad dura muy definida. El que se mete al espectador en el bolsillo a base de complicidad y un humor muy peculiar es William Fichtner, encargado de dar vida a El Contable, una especie de parca al servicio del Diablo que, interpretativamente, es lo mejor del film, arrancando sonrisas del respetable en cada aparición. Una película que girara en torno a este personaje no estaría nada mal y daría mucho juego. Sobre Billy Burke y David Morse poco que contar, salvo que el primero interpreta con mucho exceso a Jonah King, líder de una secta de "putos adoradores del Diablo" (como bien comenta el personaje de Amber Heard en un momento del film) y el segundo apenas interviene con un papel meramente testimonial como viejo amigo de Milton (Cage).


Yo os la recomendaría siempre y cuando hagaís acto de presencia en el cine con las ganas suficientes como para pasároslo bien sin pedirle peras al olmo (es decir, sin exigirle mucho a un guión realmente flojito y prefabricado a base de retales hasta componer un crisol de influencias y homenajes cinéfilos teledirigido a un determinado público). Añadir por último que la banda sonora, rebosante de canciones de rock y country & roll, es de lo mejorcito del film (y es merecedora de una entrada aparte, igual que los coches, auténticas joyas de la carretera...) y que, como suele ocurrir últimamente, el 3D es una mera excusa para lanzarnos cosas a la cara, y este recurso empieza a sobrar en el mundo del cine.  En definitiva, que Nicolas Cage sigue sin redimirse, pero al menos divierte un rato con una película que he saboreado como si se tratara de un episodio de Sobrenatural con algo más de metraje, caras conocidas y sin los hermanos Winchester...



En Tiempo de Brujas (Dominic Sena, 2010)

Título original: Season of the Witch   Género: Aventuras, Terror
Duración: 92 minutos   País: EE.UU.
Dirección: Dominic Sena   Guión: Bragi F. Schut
Intérpretes: Nicolas Cage, Ron Perlman, Stephen Campbell Moore, Stephen Graham, Christopher Lee, Claire Foy
Música: Atli Örvarsson   Web: tripictures.com/entiempodebrujas/

Dos caballeros Cruzados encuentran, al volver a casa, que el mundo que conocían está siendo arrasado por la peste. La Iglesia está convencida de que una joven, presuntamente bruja, es la culpable de la situación y encargan a ambos caballeros la misión de escoltarla a un monasterio remoto para determinar qué hacer con la acusada.

Ay, amigo Nicolas Cage, cómo hemos cambiado... Cuán lejanos quedan ya los días de Arizona Baby, y Corazón Salvaje, el Oscar por Leaving Las Vegas o las cintas de acción tipo La Roca, Con Air o Cara a Cara. Llevas tiempo viviendo en el siempre peligroso filo de la navaja y, lejos de sacar la cabeza del todo y coger aire para afrontar la recta final de tu carrera, te ves una y otra vez inmerso en proyectos de dudosa calidad en los que, misteriosamente, casi siempre has de lucir una cabellera nada lustrosa cuya no-naturalidad es manifiesta. Quién sabe: quizá las deudas te acucien y tengas que decir sí más veces de las que deberías, o puede que ya no se fijen en tí para otro tipo de papeles y hayas quedado relegado a esto, pero si te soy sincero, aparecer cada dos por tres en pantalla como un mendigo del Bershka (Sonia Unleashed dixit) no hará que recuperes tu sitio.


Y después de este pequeño mensaje que a buen seguro no le llegará jamás al bueno de Cage, es de recibo que exponga una idea concisa y meridiana sobre En Tiempo de Brujas: es una película bastante deficiente ("una mierda como una catedral", como dirías tú, cariño) y tremendamente vacia y estéril. Y eso es significativo viniendo de una persona como yo, que es fan del Nicolas Cage pre-peluquín, que disfruto con las películas históricas sin importar el grado de veracidad que contengan, y que no le hago ascos a una historia que tenga espadas y/o brujería.


Con un guión realmente simple y sin ningún tipo de reto argumental que ponga a prueba ni a los propios protagonistas ni al espectador (se ha lucido el ¿guionista? Brafi F.Schut...), la película se desarrolla sin pena ni gloria de una forma tan plana que llega a aburrir. No es de extrañar que, minutos antes de su supuesto clímax final, servidor disfrutara de unos minutos de paz y quietud con los ojos cerrados, totalmente desvinculado de la historia y habiendo desconectado de lo que acontecía en pantalla: vamos, que me dormí un poco. Lo único decente es la intro, y es breve. De ahí hasta el final (¡toma efectos especiales cutres y CGI casposo!), sopor y aspecto de telefilm de sobremesa.


Por lo menos podemos disfrutar del siempre imponente Ron Perlman, cuya presencia siempre es de agradecer, aunque en esta ocasión le toque hacer de compañero de armas de Cage, en una relación de amistad totalmente inverosímil y cogida con pinzas. De Nicolas Cage no pienso comentar absolutamente nada en cuanto a su interpretación. Le tengo cariño, aprecio y cierta fe, y como no tengo nada bueno que decir, pues mejor opto por el silencio. Eso sí, me reitero en lo que comentaba al principio: espero y deseo que sus apuros económicos acaben pronto, por su bien y por el nuestro. Se nota en la película que Cage no está cómodo y que está donde está porque necesita lo que  necesita... El cameo de Christopher Lee es, por desgracia, breve, lo que no impide que el mítico actor londinense siente cátedra una vez más.


Cuarenta millones de dólares son muchos millones para una película que hace gala de un cutrerío visual galopante, que adolece de una falta total de compromiso de su actor estrella y que, sin duda, dará mucho que hablar, negativamente, en este 2011. Ojo a los Razzies en la próxima edición...

En Tiempo de Brujas: así han traducido en España "Season of the Witch"


Así es: Season of the Witch se titulará en España "En Tiempo de Brujas" y, aunque no es una traducción totalmente fiel al título original, no es de las peores traducciones realmente "libres" que llevamos años sufriendo...

El pasado sábado pude ver el trailer en castellano justo antes de la proyección de "Los próximos 3 días" y si os soy sincero, yo no me la pienso perder. El cóctel Cage+Perlman+Edad Media+Brujería me entró directamente por los ojos y me caló hondo, así que pueden contar con mi entrada y otra de propina (¿verdad, Perse?).  Además, no pienso perderme una nueva lección de interpretación a cargo del Maestro Christopher Lee.

En EE.UU. no le está yendo nada bien en taquilla y en su primer fin de semana tan sólo recaudó 10 millones de dólares, situándose en tercer lugar en un fin de semana bastante pobre en cuanto a estrenos se refiere. Espero que eso no suponga que nos priven de poder verla en pantalla grande aquí, en España...

Season of the Witch: nuevo trailer y póster...


Pues sí, ya tenemos lo nuevo de Nic Cage en el horizonte después de su última incursión en el mundo del cine dando vida al mago Balthazar Blake en El Aprendiz de Brujo. La película, cuyo reparto se completa con gente de la talla de Ron Perlman o Christopher Lee, se titula Season of the Witch y tiene previsto su estreno en pantallas norteamericanas para el 7 de enero del próximo 2011, que está a la vuelta de la esquina. En España, como suele suceder, desconocemos todavía cuándo nos llegará. 

Lo que sí conocemos es el argumento del nuevo film de Cage que transcurre en la Europa del siglo XIV: "el caballero Lavey (Nicolas Cage) escolta a una joven acusada de brujería a un monasterio. Allí los monjes indicará que el poder de la chica es la razón de que la peste negra asole y destruya el continente en esos momentos. Renegando de esta teoría, Lavey y un grupo de bravos guerreros partirán en un viaje donde intentarán demostrar que la chica es inocente. El viaje les llevará a un lugar místico donde las fuerzas de las oscuridad les esperan..."

Ilustrando esta entrada teneís, en primer lugar, el nuevo póster promocional de la película, junto al primer cartel que se lanzó sobre la misma, y a continuación os dejo con el nuevo trailer, en el que podemos comprobar nosotros mismos que el señor Cage luce el pelo cada vez más largo según va protagonizando películas. Supongo que el salir en pantalla con un buen peluquín es condición indispensable para que el bueno de Cage acepte el papel. En fin, ahí va el trailer...

Drive Angry 3D: nuevo poster y trailer


Ya os hablé de Drive Angry 3D en su día, y ahora toca echar un vistazo al nuevo cartel y trailer de esta película de venganza protagonizada por nuestro querido Nic Cage, inmerso en su particular cruzada de recaudación de dinero a toda costa para huir de las garras del fisco. En esta ocasión, y como ya os comenté en aquella entrada, Cage se mete en la piel de un ex-convicto que vuelve de la tumba para vengarse de los cabrones que han matado a su hija y han secuestrado a su nieta para sacrificarla en alguna especie de ritual satánico. Ver para creer, yo no me la pierdo...



Fuentes: shocktillyoudrop.com y traileraddict.com

WTF??? El pelo de Nicholas Cage

"Dentro de cien años, todos calvos", reza un popular refrán español. Y por si esa sentencia no fuera lo suficientemente contundente, ya lo avisaba Javier Gurruchaga con La Orquesta Mondragón: "A todos el pelo se nos caerá, más pronto o más tarde el otoño llegará, algunos en la cuna lo pierden ya, otros a la tumba esperan llegar, ¡Ponte peluca, Ponte la peluca ya!". Sabias palabras, sin ninguna duda...

Sin embargo, mucha gente parece intentar resistirse a esta máxima vital mediante injertos, peluquines, pinturas para el cuero cabelludo y otras extravagancias. Y en Hollywood tenemos un personaje que, en lugar de aceptar su calvicie y raparse como ya lo hicieran Bruce Willis y John Travolta, lucha con todas sus fuerzas y lo que el bolsillo le permite contra su incipiente calva. Nos referimos, cómo no, al gran Nicholas Cage, querido por muchos, denostado por otros tantos, pero siempre en boca de todos. En Joblo.com me he encontrado esta semana un diagrama que analiza la evolución que ha sufrido el pelo de Nic Cage a lo largo de su carrera cinematográfica, dejando de lado sus implantes en la vida real. El resultado es el siguiente:


Increible los mil y un postizos que este hombre se ha colocado a lo largo de su carrera, y memorales los que utilizó en films como Con Air, Ghost Rider, Bangkok Dangerous y las que tiene pendiente de estreno: El Aprendiz de Brujo y Season of the Witch. ¡¡Esas melenas falsas son un grito al cielo clamando un "quiero y no puedo" bien alto!! A pesar de todo, Nic me cae simpático. Ya he manifestado en más de una ocasión que no me parece mal actor (quizás pelín histriónico...) y que tiene un buen puñado de películas más que dignas. Eso sin contar el Oscar a Mejor Actor que le dieron después de salirse con su papelón en Leaving Las Vegas. Eso si, si me permites un consejo, Nic, deja que la evolución siga su curso y si te depara el quedarte mondo y lirondo, asúmelo, o quién sabe, con tanto injerto podrías acabar así:

Related Posts with Thumbnails